Tarta de Crema de Manzana
Ingredientes: Para la masa: -4 huevos, -250 g de azúcar, -250 g de harina, -1/2 de levadura en polvo, -6 cucharadas de agua caliente, - aroma: vainilla, - ralladura de limón, - naranja. Para la crema: -700 ml de agua, -8 cucharadas de azúcar, - 1/2 ralladura de limón, -unos 600 g de manzanas limpias y cortadas en dados, -2 flanes de vainilla, -5 g de gelatina. Para la decoración: -500 ml de nata líquida montada -frutas Para el almíbar: -150 ml de agua -4 cucharadas de azúcar, -2 sobres de azúcar avainillado
La Base: Comienza separando con cuidado las claras de los huevos de las yemas, asegurándote de que no quede rastro de yema en las claras para lograr una espuma perfecta. Bate las yemas junto con el azúcar utilizando una batidora eléctrica hasta que la mezcla se vuelva clara y espumosa. Este proceso es esencial, ya que el aire incorporado ayudará a conseguir una base esponjosa y aireada. Agrega gradualmente el agua caliente, mezclando continuamente para mantener la homogeneidad de la mezcla. En este momento, añade los sabores deseados, como esencia de vainilla o ron, para proporcionar un sabor agradable. Tamiza la harina junto con el polvo de hornear e incorpóralos con cuidado a la mezcla de yemas, utilizando una espátula, con movimientos suaves de arriba hacia abajo. Finalmente, bate las claras a punto de nieve y agrégalas suavemente a la mezcla, asegurándote de no destruir su estructura aireada.
Vierte la masa en el molde para pasteles, que ha sido forrado con papel de hornear, y colócala en el horno precalentado a 180 grados Celsius durante unos 20 minutos. Verifica si la base está horneada introduciendo un palillo en el centro; si sale limpio, la base está lista. Retira la base del molde y déjala enfriar sobre una rejilla, luego transfiérela a un plato hondo, teniendo cuidado de mantener el aro alrededor para ayudar en el proceso de empapado.
Prepara el jarabe de agua y azúcar hirviéndolos juntos hasta que el azúcar se disuelva por completo. Empapa generosamente la base para que se vuelva húmeda y aromática, preparando el terreno para la deliciosa crema.
La Crema: Lava las manzanas y córtalas en cubos pequeños. Hiérvelas en una olla con agua, azúcar y jugo de limón hasta que se ablanden. Este paso no solo las ablandará, sino que también ayudará a intensificar los sabores. En un tazón pequeño, deja que la gelatina se hidrate en una cucharada de agua, siguiendo las instrucciones del paquete. Después de que las manzanas se hayan hervido, vierte los dos sobres de pudín diluido en 250 ml de agua sobre ellas y mezcla bien. Lleva la mezcla a ebullición, revolviendo constantemente para evitar que se formen grumos, hasta que espese. Una vez que el pudín se haya espesado, retíralo del fuego y añade la gelatina hidratada, mezclando con cuidado hasta que se disuelva por completo.
Vierte la crema de manzana sobre la base preparada y déjala enfriar y cuajar, idealmente durante la noche, para lograr una textura perfecta. Al día siguiente, retira con cuidado el aro, teniendo cuidado de no dañar los bordes del pastel.
Para decorar, bate la nata hasta que esté firme y esponjosa. Cubre el pastel con una capa uniforme de nata montada y decóralo a tu gusto, utilizando frutas frescas, chocolate rallado o copos de almendra tostada. Sirve con orgullo esta delicia y disfruta de la apreciación de tus seres queridos!
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