6 Componentes 2 Postres

 Ingredientes: Una base de pastel (bizcocho, brownies, etc.) 1 pudín de vainilla (o lo que te guste según la base que tengas) fresas (otras frutas según preferencias) azúcar (según las indicaciones de la caja de pudín) huevos (según las indicaciones de la caja de pudín) leche (según las indicaciones de la caja de pudín)

Para preparar un postre delicioso y atractivo, puedes usar un trozo de pastel sobrante, o puedes optar por hornear uno nuevo. Independientemente de la opción elegida, asegúrate de que la capa esté horneada en una forma redonda o de tipo cheque, para que logres la altura adecuada para tu postre. Si decides usar una capa simple, también encajará bien, pero una capa de cheque puede agregar una textura interesante.

Comenzamos preparando la capa. Si usas una sobrante, corta con cuidado la parte superior y ahueca el medio, asegurándote de dejar los bordes y el fondo intactos. Las sobras de pastel que obtengas puedes guardarlas para usarlas en otro postre. Estas se convertirán en parte de un delicioso parfait, así que no las tires.

El siguiente paso es preparar un pudín delicioso. Sigue las instrucciones del paquete, pero para obtener una consistencia más firme, usa una cantidad ligeramente menor de leche de la indicada. Este pudín será el ingrediente de unión entre las capas de fruta y pastel.

Después de haber cocido el pudín, lava y corta las fresas en trozos adecuados. Ahora es el momento de ensamblar el postre. En el hueco de la capa de pastel, agrega una capa de fresas cortadas, seguida de una capa de pudín caliente. Pon más fresas encima, luego presiona suavemente para combinar los ingredientes. Agrega otra capa de pudín y, para asegurar una buena unión, unta ligeramente los bordes superiores de la capa con un poco de pudín.

Después de haber terminado de ensamblar el primer postre, pasa al segundo. Elige vasos más grandes y comienza a colocar capas dentro de ellos. Coloca algunos trozos de fresas en el fondo de los vasos, luego agrega las sobras de la capa de brownies, seguidas de una capa de pudín. Continúa alternando las capas: fresas, brownies, pudín, hasta que llenes los vasos. Estas capas desiguales agregarán un aspecto rústico y apetitoso.

Una vez que hayas terminado de ensamblar todos los componentes, enfría los postres durante unas horas. Este paso es esencial para permitir que los sabores se mezclen y las texturas se estabilicen. Al final del día, cuando te reúnas con amigos, saca los postres del refrigerador y sírvelos con un vaso de conversación. Estas delicias seguramente serán apreciadas, y la combinación de cremas y frutas traerá una sonrisa a los rostros de todos.

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