Pollo Hawaiano
Ingredientes: -500g de pechuga de pollo -2 cucharadas de salsa de soja -4 cucharadas de aceite de girasol -1 pimiento rojo -3 cebollas verdes (solo la parte verde) -300g de piña -1 cucharada de maicena -sal -3 cucharadas de agua -2 cucharadas de jugo de piña -1 cucharadita de pimentón
Para preparar un delicioso plato de pechuga de pollo con piña, comenzamos cortando la pechuga de pollo en trozos de tamaño adecuado. Estos absorberán mejor los sabores de la marinada. Transferimos los trozos de carne a un tazón grande. Encima de ellos, añadimos una cucharadita de pimentón, que les dará un tono agradable y un sabor ligeramente ahumado. Continuamos vertiendo dos cucharadas de aceite de girasol, dos cucharadas de salsa de soja, que añadirá una capa de umami, y una pizca de sal para realzar los sabores. Mezclamos muy bien los ingredientes para que cada trozo de carne esté uniformemente cubierto con la marinada. Una vez que terminamos, cubrimos el tazón con film transparente y lo colocamos en el refrigerador, dejando que la carne marine durante al menos 20 minutos. Este paso es esencial para permitir que los sabores penetren profundamente en la carne.
Mientras tanto, nos ocupamos de la piña. Tomamos una piña fresca y la cortamos por la mitad. Ponemos una mitad a un lado, mientras que pelamos cuidadosamente la otra mitad. Si lo prefieres, puedes dejar la cáscara, pero asegúrate de que la pulpa esté cortada en trozos adecuados para incorporarse fácilmente al plato. Continuamos con el pimiento, que limpiamos, lavamos y cortamos en tiras o cubos, según prefieras.
En una sartén grande, vertemos dos cucharadas de aceite de girasol y esperamos hasta que comience a chisporrotear. Añadimos los trozos de pimiento y los dejamos sofreír durante unos 3 minutos hasta que se vuelvan ligeramente crujientes pero aún jugosos. Luego, añadimos la cebolla, que hemos pelado, lavado y cortado en rodajas finas. Dejamos que la cebolla se sofría durante 2 minutos hasta que se vuelva translúcida y libere su aroma. Ahora es el momento de añadir los trozos de pollo marinados. Es mejor desechar la marinada restante, ya que la carne absorberá suficientes sabores de la sartén.
Dejamos que todo se fría hasta que la carne esté bien cocida y jugosa. Luego, añadimos los trozos de piña, que aportarán una nota de frescura y dulzura al plato. En un tazón pequeño, mezclamos una cucharada de maicena con unas cucharadas de agua y jugo de piña para crear una salsa que espese el plato. Vertemos esta mezcla sobre las verduras y la carne en la sartén, revolviendo bien para cubrir uniformemente la salsa. Dejamos hervir un poco hasta que la salsa espese y se vuelva brillante.
Una vez que el plato esté listo, lo retiramos del fuego y dejamos enfriar un poco. Este plato combina perfectamente con arroz hervido, que complementará los deliciosos sabores del pollo con piña. ¡Buen provecho!
Etiquetas: cebolla pollo carne pimiento aceite frutas soja recetas sin gluten

