Tomates secos, polvo de tomate y copos de tomate

 Ingredientes: Así que tomates Roma porque no tienen mucho jugo y no muchas semillas, cebolla al gusto, ajo al gusto, sal y pimienta al gusto, aceite de oliva bastante (depende de la cantidad de tomates que tengas), vinagre blanco o aromatizado con estragón, ajo, albahaca, salvia, romero, etc., hojas de diferentes sabores (albahaca, salvia, romero, orégano), deshidratador de frutas o horno de cocina, frascos con tapa.

Para preparar deliciosos tomates secos, es importante tener tomates con un contenido de humedad más bajo a mano. Deben cortarse con cuidado, asegurándose de que no sean demasiado gruesos, para un secado uniforme. Después de cortar los tomates, colóquelos en un deshidratador o en una bandeja para hornear. El deshidratador se enciende a temperatura media y se dejan secar los tomates durante 8-10 horas hasta que se vuelvan quebradizos. Si opta por el horno, configúrelo a la temperatura más baja, dejando la puerta entreabierta, usando el mango de una cuchara de madera para permitir la circulación del aire. Es esencial revisar periódicamente las rodajas de tomate, dándoles la vuelta por ambos lados para asegurar un secado uniforme.

Antes de colocarlos a secar, los tomates se salan y pican, y si lo desea, puede espolvorear hojas de albahaca picadas finamente para un sabor extra. Una vez que los tomates están secos, retírelos de la máquina o del horno y colóquelos en un plato para proceder al siguiente paso, que es moler. Use un colador fino para tamizar las rodajas secas; el polvo que pasa a través del colador se convertirá en polvo de tomate, mientras que el resto serán copos. Estos últimos se pueden combinar con hierbas secas como orégano o tomillo, así como con sal y pimienta para crear una mezcla perfecta para pizza o para sazonar carnes.

El polvo de tomate también se puede mezclar con sal, pimienta y ajo seco triturado para un sabor intenso. Si desea conservar tomates en frascos, córtelos en cuartos, sáles y pimientos, y colóquelos en el deshidratador. Después de aproximadamente 10-12 horas, retire los tomates del horno, dándoles la vuelta ocasionalmente. Una vez secos, escáldelos en vinagre, luego colóquelos en frascos, intercalándolos con ajo, cebolla y diversas hierbas según sus preferencias.

Después de llenar los frascos con tomates, vierta el vinagre utilizado para escaldar sobre ellos y complete con aceite de oliva, dejando un espacio libre en la parte superior. Coloque los frascos en una olla grande, con toallas en el fondo, y vierta agua hasta 2 dedos del borde de los frascos. Hierva durante aproximadamente 45 minutos, comenzando a cronometrar desde el momento en que el agua comienza a hervir. Los tomates en conserva se pueden mantener a temperatura ambiente, pero una vez que los frascos están abiertos, se recomienda mantenerlos en el refrigerador. Además, después de consumir los tomates de los frascos, no olvide agregar aceite para mantener los tomates cubiertos con líquido, y el aceite restante se puede utilizar con éxito en ensaladas o en diversos platos culinarios para un sabor extra. Estos tomates secos no solo añaden sabor a los platos, sino también un toque de elegancia a su mesa.

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