Sopa crema de calabaza

 Ingredientes: Calabaza para pie – 800 g – 1 kg Crema de cocinar (de leche de vaca) – 200 ml Agua hirviendo (o caldo de verduras) – aprox. 600 ml Orégano fresco – 7-8 hojas Queso parmesano rallado – 100 g Cebolla verde – ½ manojo Aceite infusionado con chile – al gusto Aceite infusionado con albahaca – al gusto Sal y pimienta blanca – al gusto

Para preparar una deliciosa y aromática sopa de calabaza, comenzamos cortando la calabaza en cubos pequeños. Es importante elegir una calabaza fresca y de temporada para lograr un sabor intenso y una textura cremosa. Una vez que la calabaza esté cortada, la colocamos en la olla de cocción lenta de 4.7 litros. Este aparato asegurará una cocción uniforme y lenta, sacando a relucir todos los sabores de los ingredientes.

El siguiente paso es picar finamente la cebolla verde. Esto añadirá un sabor sutil y un toque de frescura a la sopa. La cebolla verde, con sus hojas tiernas, se combinará perfectamente con la dulzura de la calabaza. Espolvorea la cebolla picada sobre los cubos de calabaza, asegurándote de que esté distribuida uniformemente para permitir que los sabores se entrelacen.

Agrega orégano, una hierba aromática que proporcionará un acento mediterráneo a tu sopa. Su aroma ligeramente picante y floral hará que cada cucharada sea una experiencia gustativa inolvidable. Ahora, es el momento de añadir agua hirviendo sobre los ingredientes. El agua caliente ayudará a liberar los sabores y acelerará el proceso de cocción.

Configura la olla de cocción lenta en el modo de cocción "alta" durante un período de 3 horas y 30 minutos. Coloca la tapa y deja que los ingredientes se cocinen lentamente, de modo que la calabaza se ablande y se transforme en una sopa cremosa. Después de que el tiempo de cocción haya expirado, retira la tapa y usa una batidora de inmersión para hacer puré la mezcla.

Mezcla bien hasta obtener una textura fina y cremosa. Una vez que tengas la consistencia deseada, es hora de sazonar con sal y pimienta blanca para realzar el sabor de la sopa. Agrega queso parmesano rallado, que aportará un sabor extra, y crema de cocina para hacer la sopa aún más cremosa. Mezcla de nuevo para combinar todos los ingredientes.

Para servir, puedes añadir un chorrito de aceite infusionado con chile o albahaca, que añadirá un toque picante y refinado. Los picatostes de pan o las virutas de chorizo añadirán una textura crujiente, contrastando perfectamente con la cremosidad de la sopa. Esta sopa de calabaza es ideal para las noches frescas, brindando calidez y confort en el plato. ¡Buen provecho!

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