Lasaña a Oído (Torta de Lasaña)

 Ingredientes: Hojas de lasaña, puse 17 pero depende del plato que estés usando. 10 rebanadas de tocino, 6-7 cucharadas de ricotta, 300 g de mozzarella rallada, 200 g de telemea de vaca, 200 g de carne de cerdo molida, 100 g de salsa pesto, 9-10 tomates, 200 ml de nata montada sin azúcar, 10 dientes de ajo, sal y pimienta al gusto, albahaca fresca, 1 hoja de laurel, 3-4 cucharadas de aceite.

Hervir las láminas de lasaña en una olla grande con agua salada y una cucharada de aceite durante aproximadamente cinco minutos, comenzando desde el momento en que el agua alcanza el punto de ebullición. Una vez cocidas, retíralas con una espumadera y colócalas en un colador. Luego, enjuaga bajo un chorro de agua fría para detener el proceso de cocción. Coloca las láminas en platos, una al lado de la otra, sin superponerse, para evitar que se peguen. Cubre con papel film y reserva.

A continuación, preparamos la salsa marinara. Pela y quita las semillas de los tomates, luego aplástalos bien. Colócalos en una olla a fuego medio. Cuando la salsa comience a hervir, añade sal, pimienta y una hoja de laurel, que se retirará al final. Deja hervir hasta que la salsa espese. Una vez que alcance la consistencia deseada, añade 4-5 dientes de ajo triturados y hierve por un minuto más. Retira del fuego y añade las hojas de albahaca fresca picadas finamente. Cubre y reserva.

Ahora pasamos a preparar la salsa de queso con pesto. Toma la mitad de la nata para montar, llévala a ebullición, condimenta con sal y pimienta, y deja hervir bien. Añade dos o tres cucharadas de salsa pesto, dependiendo de tu preferencia, y mezcla hasta que esté bien combinado. Luego, añade mozzarella, dos cucharadas a la vez, removiendo constantemente hasta que la salsa espese. Finalmente, añade tres dientes de ajo picados y retira del fuego, cubriendo para mantener el calor.

Para la salsa de queso, lleva el resto de la nata para montar a ebullición, condimenta con sal y pimienta, y cuando comience a hervir, añade mozzarella, asegurándote de que la salsa se espese, pero no en exceso. Cubre de nuevo y reserva.

La carne de cerdo picada se sazona con sal, pimienta, pimentón y ajo, luego se fríe en una sartén con un poco de aceite. Cocina hasta que cambie de color, luego añade un poco de salsa marinara para combinar los sabores, luego apaga el fuego y reserva.

Ahora estamos listos para ensamblar la lasaña. Toma un plato hondo y comienza a forrarlo con las láminas de lasaña. Las láminas se superponen bastante, ya que deben soportar el peso del relleno. Cubre también el fondo del plato, teniendo cuidado de cortar la segunda y tercera lámina para evitar una capa de pasta demasiado gruesa. Los bordes de las láminas de lasaña se dejan colgando, ya que los usaremos al final. Los restos cortados no se tiran, sino que se guardan para su uso posterior.

Después de forrar bien el plato, comenzamos a construir las capas. Al principio, ponemos mozzarella rallada, seguida de tocino frito y escurrido de grasa. Luego, añadimos queso feta y una capa de salsa de queso con pesto. Continuamos con los restos de pasta y formamos nuevas capas. Colocamos queso ricotta, feta, carne con salsa marinara, mozzarella rallada, salsa marinara y más láminas de lasaña, repitiendo el proceso hasta llegar al borde del plato.

Es esencial intercalar bien la mozzarella y las salsas de queso con las capas de pasta, ya que proporcionan estabilidad. Cubre la lasaña con los bordes de las láminas de pasta y, nuevamente, corta algunas para evitar un exceso de masa. Coloca en el horno hasta que la lasaña esté bien caliente por dentro y la mozzarella se derrita, llenando los huecos.

Durante este proceso, pueden quedar restos de láminas e ingredientes. Estos no se tiran, sino que se forma una lasaña más pequeña en un plato separado, que se puede congelar para ocasiones futuras. Después de preparar la gran lasaña, déjala enfriar en el plato durante la noche. Al día siguiente, usando un cuchillo de hoja larga, desprende las láminas de los lados del plato y voltea la lasaña sobre un plato grande. Porciona según el número de personas y calienta cada porción en un plato precalentado. Decora con perejil o albahaca fresca, añade queso o salsa marinara por encima y sirve, acompañada de pan tostado y una copa de vino.

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