Paté de Hígado de Pollo, en un Vaso
Ingredientes: Para el relleno: 500 g de hígado de pollo, 2-3 huevos, una cucharada de crema agria, mucha hierba (perejil, eneldo, partes verdes de cebolla). Para hornear en tazas: 2 huevos por cada taza con relleno.
Para preparar una deliciosa receta de hígados con hierbas, comenzamos hirviendo los hígados en una gran cantidad de agua hirviendo, sin sal. Es esencial que el agua sea abundante, ya que esto mantendrá una temperatura constante, incluso cuando se agreguen los hígados o los filetes de pechuga de pollo, que tienen una temperatura más baja. Dejamos hervir los hígados durante unos cinco minutos, luego los sacamos con una espumadera y los dejamos enfriar.
Mientras tanto, nos ocupamos de las hierbas. Picamos las cebollas verdes, incluidas las colas, de una manera que proporcione un contraste estético agradable, preferiblemente en diagonal. Esta técnica agrega no solo un aspecto atractivo, sino también una textura interesante al plato final. Una vez que los hígados se han enfriado, los picamos finamente, teniendo cuidado de no usar un procesador de alimentos, ya que no queremos obtener un paté, sino una composición visible. Mezclamos los hígados picados con las hierbas, agregando los huevos y la crema agria, obteniendo así una mezcla homogénea.
El siguiente paso es engrasar algunos vasos resistentes al calor. Espolvoreamos generosamente las hierbas dentro de los vasos, girando para asegurarnos de que las paredes estén cubiertas uniformemente. En el fondo de cada vaso, colocamos un huevo crudo, y encima, colocamos 1-2 cucharadas de la mezcla, que presionamos suavemente y alisamos. Es importante no llenar el vaso hasta arriba, ya que necesitaremos suficiente espacio para agregar otro huevo crudo sobre la mezcla.
Después de llenar los vasos, los envolvemos en papel y los colocamos en una olla, en el fondo de la cual hemos puesto una toalla doblada. Vertemos agua tibia o caliente para cubrir los vasos, pero sin inundarlos. Cubrimos la olla con una tapa y cocemos a fuego lento, de modo que el agua hierva suavemente. El plato se considera listo cuando el huevo de arriba se ha cuajado, lo que indica que los hígados se han cocinado perfectamente.
Cuando estemos listos para servir, sacamos el contenido de los vasos, cortando cada porción en cuartos, lo que dará un aspecto similar al de un helado cortado. Esta receta se puede adaptar fácilmente, con el relleno permitiendo espacio para la imaginación, siempre que los ingredientes sean compatibles. Ya sea que elijas usar diferentes tipos de hierbas o agregar otros ingredientes favoritos, esta receta es una excelente base para experimentar y crear un plato único y sabroso.
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