Rollos con Romero y Parmesano

 Ingredientes: 500 g de harina, 200 ml de agua tibia, 25 g de levadura, 75 g de mantequilla, 25 g de manteca, 10 g de sal, 50 g de azúcar, 1 huevo, 1 cucharada de romero picado, 100 g de parmesano, 1 huevo para pintar

Para preparar estos deliciosos rollos, comienza disolviendo la levadura en agua tibia, mezclándola con una cucharadita de azúcar. Este paso activará la levadura y la masa crecerá maravillosamente. En un tazón grande, pon la harina, luego agrega la mezcla de levadura, el huevo y continúa mezclando. Es importante hacer esto con una cuchara de madera o a mano para lograr una textura homogénea. Una vez que los ingredientes se hayan combinado, añade la sal, el romero fresco picado, la mantequilla suave y la manteca derretida, mezclando de nuevo.

Cuando la masa se vuelva elástica y suave, cúbrela con un paño limpio y déjala reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 2 horas, hasta que duplique su volumen. Esta es la etapa crucial, ya que la levadura hará que la masa sea esponjosa y aireada. Después de que la masa haya crecido, espolvorea un poco de harina sobre la superficie de trabajo y extiéndela en una hoja rectangular, teniendo cuidado de no estirarla demasiado delgada.

Espolvorea uniformemente el parmesano rallado sobre toda la superficie de la masa y, con las palmas, presiónalo suavemente para incorporarlo. Esto añadirá un sabor intenso a tus rollos. Si prefieres rollos más pequeños, es una buena idea dividir la masa en dos, creando dos rectángulos más pequeños. Enrolla la masa con cuidado, formando un tronco apretado, luego córtala en piezas de aproximadamente 2 centímetros. Estas se convertirán en tus rollos esponjosos.

Coloca las piezas cortadas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, asegurándote de dejar suficiente espacio entre ellas para que sigan creciendo. Déjalas reposar durante 15 minutos, cubriéndolas ligeramente con un paño. Antes de meterlas en el horno, bate un huevo y unta cada rollo con él para obtener una corteza dorada y apetecible. Precalienta el horno a 180 grados Celsius y hornea los rollos durante unos 20 minutos o hasta que estén hermosamente dorados.

Al final, puedes optar por colocar los rollos de pie o con el lado cortado hacia arriba, dándoles un aspecto rústico y atractivo. Estos rollos son deliciosos tanto calientes como a temperatura ambiente, perfectos para servir en una comida festiva o simplemente como un refrigerio sabroso. Los sabores de romero y parmesano se combinan a la perfección, y la textura esponjosa hará que cada bocado sea un verdadero placer.

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