Espaguetis con pesto de rúcula y calabacín

 Ingredientes: -250g de espaguetis -200ml de agua + agua para hervir los espaguetis -1 puñado de rúcula -2 nueces -2 dientes de ajo -7 cucharadas de aceite de oliva -1 calabacín -4 cucharadas de queso -sal -pimienta

Los espaguetis son un plato clásico, apreciado por todos por su versatilidad y delicioso sabor. Comenzamos hirviendo los espaguetis según las instrucciones del paquete. Es importante usar una cantidad generosa de agua y agregar sal para realzar el sabor de la pasta. Una vez cocidos al dente, los escurrimos y los dejamos enfriar un poco mientras preparamos la salsa.

En una sartén antiadherente, agregamos 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, que aportará un sabor rico al plato. Luego, añadimos un diente de ajo entero, que infundirá el aceite con su inconfundible aroma. El ajo dejará un delicioso aroma en la sartén, y más tarde lo retiraremos para que no domine la salsa.

El calabacín, un ingrediente versátil y saludable, se lava bien bajo un chorro de agua fría. Luego, lo cortamos en cuartos, retiramos la parte blanca del interior y lo cortamos en cubos pequeños. Estos cubos se añaden a la sartén, donde el ajo ya se ha ablandado. Dejamos que el calabacín se saltee suavemente, revolviendo de vez en cuando para que se dore uniformemente. Después de unos minutos, añadimos 200 ml de agua, sal y pimienta al gusto. Esto ayudará a cocinar completamente las verduras y creará una base deliciosa para la salsa.

Una vez que el agua se haya reducido significativamente, apagamos el fuego y dejamos que el calabacín se enfríe un poco. En otro recipiente, lavamos bien la rúcula, un ingrediente lleno de vitaminas y minerales que aportará frescura al plato. La ponemos en el vaso de la batidora, añadimos otro diente de ajo y las nueces, que aportarán una textura crujiente y un sabor profundo.

Retiramos el ajo frito de la sartén y añadimos los cubos de calabacín al vaso de la batidora, sobre la rúcula y los demás ingredientes. Espolvoreamos un poco de sal y añadimos 4 cucharadas de aceite de oliva, que contribuirá a crear una salsa cremosa y sabrosa. Mezclamos todo a alta velocidad durante unos minutos hasta obtener una pasta homogénea y fina.

Cuando los espaguetis estén listos, los ponemos en un bol grande y vertemos la salsa preparada sobre ellos, mezclando bien para asegurarnos de que cada hebra de espagueti esté cubierta uniformemente. Finalmente, añadimos unas cucharadas de queso, que se derretirá ligeramente, aportando un extra de sabor y cremosidad. Servir inmediatamente, disfrutando de un plato saludable y sabroso. ¡Buen provecho!

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