Pasta con Erizo de Mar
Ingredientes: Para 2 porciones: pasta corta 150 g de garbanzos cocidos (1/2 lata) 1/2 pimiento 1/4 cebolla 1 diente de ajo 1 zanahoria 3 hojas de remolacha tomates triturados (2 cucharadas) romero aceite, sal
Para preparar una sopa deliciosa y nutritiva, comenzamos por preparar los ingredientes básicos. Tomamos una zanahoria fresca, que rallamos finamente utilizando un rallador pequeño. Esto añadirá dulzura y una textura agradable a nuestro plato. Luego, cortamos un pimiento morrón colorido en cubos pequeños, que aporta un extra de frescura y un sabor vibrante. La cebolla y el ajo son esenciales para dar sabor, así que los pelamos y los picamos finamente. Para recuperarlos más fácilmente de la sopa, podemos clavarlos en un palillo, un método ingenioso que nos ayudará a encontrarlos sin problemas.
En una olla, añadimos todas estas verduras ralladas y picadas, junto con las hojas de remolacha, que picamos finamente. Espolvoreamos un poco de sal para ayudar a que las verduras liberen sus jugos y se cocinen uniformemente. A continuación, vertemos una o dos cucharadas de pasta de tomate, que proporcionará un sabor rico y un color atractivo a la sopa. Añadimos los garbanzos enlatados, escurridos y enjuagados, asegurándonos de que la ingesta de proteínas sea generosa.
Después de añadir suficiente agua, dejamos que la mezcla hierva a fuego lento, revolviendo de vez en cuando para evitar que se pegue. Algunos de los garbanzos, aproximadamente 1-2 cucharadas, pueden ser retirados de la sopa antes de mezclar el resto. Este paso es importante para crear una textura cremosa. Mezclamos los garbanzos restantes hasta obtener una pasta fina y la añadimos de nuevo a la olla, junto con los garbanzos enteros reservados. Esta mezcla hará que la sopa no solo sea más cremosa, sino que también ofrezca un contraste agradable entre la textura fina y los granos enteros.
Finalmente, retiramos la cebolla y el ajo, para dejar solo sus sabores en la sopa, y añadimos algunas ramitas de romero fresco, que añadirán una fragancia irresistible. Dejamos que la sopa hierva de nuevo, luego apagamos el fuego, cubriendo la olla para permitir que los sabores se mezclen perfectamente. Mientras tanto, cocemos la pasta en otra olla con agua salada, según las instrucciones del paquete. Cuando esté al dente, la escurrimos y la añadimos a la sopa, mezclando bien para combinar todos los ingredientes.
Así, obtenemos una sopa deliciosa, llena de nutrientes y sabores, perfecta para una comida reconfortante. Servida caliente, esta receta de sopa seguramente traerá sonrisas a los rostros de nuestros seres queridos. ¡Buen provecho!
