Pudín de pasas
Ingredientes: 200g de harina, 150g de mantequilla, 2-3 cucharadas de pan rallado fino, 2-3 cucharadas de azúcar en polvo, levadura en polvo, azúcar vainillado, un puñado grande de pasas, cáscara de limón rallada, leche al gusto.
Para preparar un postre delicioso y único, comenzamos mezclando todos los ingredientes secos, que incluyen harina, azúcar, polvo de hornear y una pizca de sal. Estos ingredientes forman la base de nuestros rollos, y es esencial combinarlos uniformemente para lograr una textura homogénea. Después de mezclar bien los ingredientes secos, añadimos la mantequilla cortada en cubos. Debe estar blanda para incorporarse más fácilmente a la mezcla. Usando los dedos o una batidora, amasaremos la mantequilla junto con los ingredientes secos hasta obtener una composición que se asemeje a migas finas.
El siguiente paso consiste en añadir la leche gradualmente, removiendo constantemente. La cantidad de leche puede variar, pero en mi caso, se utilizaron aproximadamente 100 ml. La masa debe volverse lo suficientemente suave como para manejarla con las manos, pero no tan pegajosa que se adhiera a los dedos. Una vez que la masa alcanza la consistencia deseada, nos preparamos para convertirla en rollos.
Preparamos un trozo de papel para hornear o papel encerado, que cortamos al tamaño deseado. Colocamos la masa en el borde del papel y comenzamos a enrollarla con cuidado, formando un cilindro. Es importante que el rollo esté apretado, pero no demasiado, para permitir que el vapor circule durante la cocción. Después de formar el rollo, podemos doblar los bordes o atarlos con cuerda para asegurarnos de que la masa no se desenrede durante el proceso de cocción.
En una olla grande, ponemos agua a hervir y añadimos una rejilla o un colador metálico, que sostendrá los rollos por encima del agua hirviendo. Colocamos los rollos en la rejilla, cubrimos la olla con una tapa y dejamos cocer al vapor durante aproximadamente 2 horas. Es esencial no levantar la tapa durante la cocción, para permitir que el vapor haga su trabajo.
Después de dos horas de cocción, retiramos cuidadosamente los rollos y los desenrollamos del papel. Los colocamos en un plato y los cortamos en rodajas. Una vez que hemos desenrollado los rollos, nos damos cuenta de su verdadera belleza y de por qué se llaman así. Los rollos se sirven calientes, junto a una salsa de vainilla. Para preparar la salsa, puedes usar un paquete de pudín de vainilla, añadiendo más leche de lo habitual para obtener una consistencia más líquida. Alternativamente, puedes comprar salsa de vainilla en la tienda para simplificar el proceso. Este postre seguramente será un éxito, tanto para los pequeños como para los grandes, ofreciendo una experiencia culinaria memorable.

