Mi Sopa de Ensalada

 Ingredientes: 2 rebanadas de panceta (es decir, carne y grasa de la panceta del cerdo. Hubiera sido mejor si estuviera ahumada, pero no tenía) 1 rebanada de speck ahumado cortada en cuadrados 1/6 de lechuga rizada (gentilina) 2 rebanadas de limón (las mías estaban en salmuera) una pizca de ajo en polvo (o 1 diente de ajo entero) sal (no añadí porque ya tenía ajo y limones en salmuera) una tortilla hecha con 2 huevos 1 cucharón de leche* y 4 cucharones de agua o sopa de verduras 1 cucharadita de vinagre o jugo de limón 1 taza de crema agria o yogur

Para preparar una deliciosa sopa de ensalada con tortilla y speck ahumado, comenzamos organizando todos los ingredientes necesarios. Primero, nos aseguramos de tener jamón, hojas de ensalada frescas, ajo, leche o suero, agua o caldo, limón, huevos, crema agria o yogur, vinagre y, por supuesto, speck ahumado. Esta combinación de ingredientes nos dará una sopa sabrosa llena de sabores.

El primer paso es freír el jamón, cortado en trozos pequeños, en una sartén. Nos aseguramos de que la sartén esté bien caliente para lograr un dorado uniforme. Una vez que el jamón se vuelve crujiente y dorado, lo retiramos a un plato y conservamos la grasa que quedó en la sartén. Si notamos que el jamón no ha dejado suficiente grasa, aprovecharemos esta oportunidad para añadir las hojas de ensalada, cortadas en tiras, en la misma sartén, junto con un diente de ajo entero, que aplastamos ligeramente para liberar los sabores.

Si el jamón ha dejado mucha grasa, podemos desecharla, y luego saltearemos la ensalada en la sartén. El ajo, cuando la ensalada comience a ablandarse, lo retiramos, ya que no queremos que el sabor sea demasiado fuerte. Una vez que la ensalada esté salteada, la transferimos a una olla, donde añadimos la leche o suero, agua o caldo, y las rodajas de limón. Dejamos que la mezcla hierva durante 10-15 minutos, teniendo cuidado de que la ensalada no se derrita por completo, sino que mantenga su textura.

Después de que la sopa haya hervido, la dejamos enfriar un poco, y durante este tiempo, preparamos la tortilla. Papá solía añadir un poco de harina de maíz a la mezcla de la tortilla para darle una textura más esponjosa. Así, batimos los huevos junto con la harina de maíz, un poco de sal y pimienta, y los freímos ligeramente en una sartén hasta obtener una tortilla bien dorada.

Una vez que la tortilla se haya enfriado, la cortamos en cuadrados o tiras y la añadimos a nuestra sopa, junto con crema agria o yogur, el vinagre y el speck ahumado, que añadirá un sabor extra. Mezclamos suavemente para combinar todos los ingredientes y dejamos que la sopa se infusione con los sabores durante unos minutos antes de servir. Esta sopa de ensalada con tortilla y speck ahumado no solo es nutritiva, sino que también está llena de sabores que nos recuerdan a las comidas familiares.

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