Sangría
Ingredientes: 1 litro de vino tinto de calidad, 500 ml de Sprite, 1 durazno en rodajas, 1 naranja en segmentos, 1 limón en rodajas, cubos de piña enlatada, 200 ml de jarabe de frambuesa casero, jarabe de piña enlatado (opcional), moras frescas o congeladas, 2 cucharadas de miel (azúcar o jarabe al gusto), 3 rodajas delgadas de sandía cortadas en cubos.
Para preparar una deliciosa ensalada de frutas con vino, es esencial disfrutar de la frescura y los sabores de cada ingrediente. Comienza lavando cuidadosamente todas las frutas, asegurándote de que estén limpias y listas para ser transformadas en un plato sabroso. Si usas un limón orgánico, no dudes en cortarlo con la piel, ya que la cáscara contiene aceites esenciales que agregarán un extra de sabor al plato. La naranja debe pelarse con cuidado, y las rodajas deben separarse en segmentos, facilitando así el servicio y el consumo. Los duraznos se deben cortar en trozos apropiados, y el melón se corta en cubos juguetones, que aportarán un toque de frescura.
Las moras o las frambuesas congeladas se pueden añadir directamente del congelador, sin descongelar, para preservar su textura y frescura. La piña enlatada aportará su dulzura y jugosidad. No olvides conservar el jugo de piña, ya que será un ingrediente esencial en la preparación de sangría o puede usarse más tarde, dependiendo de tus preferencias.
Una vez que todas las frutas estén preparadas, colócalas en un tazón grande y rocía miel por encima. Si lo prefieres, puedes reemplazar la miel con azúcar o jarabe de agave, dependiendo de tus gustos. Vierte vino blanco o tinto sobre las frutas, asegurándote de que todos los ingredientes estén bien cubiertos. Si eliges usar jugo de piña, agrégalo ahora junto con el jarabe de frambuesa para un sabor rico y aromático. Mezcla suavemente, teniendo cuidado de no aplastar las frutas, y coloca todo en el refrigerador durante la noche para que los sabores se combinen armoniosamente.
El día de servir, mantén la botella de Sprite o 7 Up en el refrigerador para que esté fría. Justo antes de servir, vierte la bebida carbonatada sobre la ensalada de frutas, añadiendo un aspecto efervescente y un toque de frescura. Ajusta el nivel de dulzura al gusto, teniendo en cuenta que el jarabe de frambuesa aporta una cantidad considerable de azúcar. Personalmente, opté por dos cucharadas de miel, sin necesidad de azúcar adicional.
Para servir, utiliza copas de vino de boca ancha, llenándolas con la mezcla de frutas y líquido, añadiendo algunos cubos de hielo para mantener la bebida fría. Decora cada copa con frutas frescas, para un aspecto atractivo y apetitoso. ¡Esta ensalada de frutas con vino no solo es una opción deliciosa, sino también una manera elegante de impresionar a los invitados en cualquier fiesta o reunión!
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