Sopa de Albóndigas

 Ingredientes: 1 kg de carne molida (cerdo y res) 5 yemas de huevo media apio (yo tenía congelado) 2 raíces de chirivía (yo tenía congelado) 3 zanahorias más grandes 2 cebollas 300 ml de caldo 100 ml de aceite 7 l de agua un paquete de borscht mágico un paquete de condimento para chucrut vegeta, sal y pimienta al gusto una cucharadita de tomillo 2 cucharadas de harina 2 cucharadas de vinagre lechuga y perejil al gusto

Para preparar una deliciosa sopa de albóndigas, comenzamos por preparar los ingredientes necesarios. Tomamos una cebolla mediana, que cortamos en cubitos pequeños y la ponemos en una sartén profunda, donde hemos añadido previamente unas cucharadas de aceite. La cebolla se sofríe a fuego medio, removiendo constantemente, hasta que se vuelve dorada y fragante, momento en el cual su aroma llenará toda la cocina.

Mientras tanto, nos ocupamos de las verduras de raíz. Tomamos una zanahoria, un apio y un chirivía, que rallamos. Estas verduras no solo añaden un sabor especial, sino también un color vibrante a nuestra sopa. Después de que la cebolla haya adquirido un tono agradable, añadimos las verduras ralladas sobre ella y mezclamos todo durante aproximadamente dos minutos, permitiendo que los sabores se combinen. Posteriormente, vertemos suficiente agua para cubrir las verduras, dejándolas hervir bien.

En paralelo con la ebullición de las verduras, preparamos las albóndigas. Elegimos carne picada de cerdo o de res, dependiendo de nuestras preferencias, y la mezclamos con tres yemas de huevo, la cebolla restante picada finamente, una cucharada de harina, tomillo y condimento para sarmale. Es importante mezclar bien la composición con la mano para asegurarnos de que los ingredientes estén bien incorporados. Probamos la mezcla y, si es necesario, añadimos sal y pimienta al gusto.

Una vez que las verduras han hervido, comenzamos a formar pequeñas bolitas de la mezcla de carne y las añadimos cuidadosamente a la sopa. Es esencial reducir el fuego a bajo para evitar que las albóndigas se deshagan. Dejamos que las albóndigas hiervan durante aproximadamente diez minutos a fuego bajo, luego añadimos el concentrado de tomate, que le dará a la sopa un toque de acidez y un color apetitoso.

A medida que las albóndigas se cocinan, nos ocupamos de una mezcla especial: las dos yemas de huevo restantes las mezclamos con un poco de vinagre, diluyéndolas gradualmente con la sopa caliente antes de añadirlas a la olla. Esta técnica evitará que los huevos se cuajen, dando a la sopa una textura cremosa. Ajustamos el sabor con sal y pimienta, y al final añadimos el apio picado finamente, que le dará un perfume especial.

Para finalizar, en un tazón, mezclamos el borscht con una parte de la sopa y lo incorporamos gradualmente en el caldo. La cantidad de borscht depende de cuán ácida queremos que esté la sopa. Personalmente, utilicé aproximadamente el 70% del paquete. Dejamos que la sopa hierva durante unos minutos para permitir que todos los sabores se mezclen perfectamente. La servimos caliente, junto con pan fresco o polenta, disfrutando de cada bocado!

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