Tarta de albaricoque
Ingredientes: Ingredientes para la base: 2 tazas de harina, 200 g de margarina, 150 g de azúcar, 200 g de albaricoques enlatados bien escurridos, 100 g de mermelada de albaricoque, 1-2 cucharadas de pan rallado, 150 ml de agua fría (del refrigerador), azúcar vainillado, azúcar en polvo.
Para preparar una deliciosa tarta de albaricoque, los primeros pasos comienzan con la masa. Usa 250 g de harina, 125 g de margarina, 100 g de azúcar y una pequeña cantidad de agua fría, aproximadamente 50 ml. En un bol grande, coloca la harina tamizada y añade la margarina cortada en cubos. Mezcla bien con los dedos hasta que consigas una textura similar a la arena fina. Esto asegurará una masa tierna y agradable. Luego, añade gradualmente el azúcar y el agua, amasando suavemente para formar una masa homogénea. Cuando la masa esté lista, dale forma de bola, envuélvela en film transparente y refrigérala durante 30 minutos.
Mientras tanto, prepara el molde para la tarta. Elige un molde con fondo desmontable o uno que se abra fácilmente, para que puedas sacar la tarta sin problemas después de hornear. Engrasa el molde con una capa delgada de aceite para evitar que la masa se pegue. Después de que la masa haya reposado, sáquela del refrigerador y extiéndala sobre una superficie enharinada hasta que alcance un grosor de aproximadamente 3-4 mm. Coloca la masa extendida en el molde preparado, asegurándote de cubrir bien los bordes.
Ahora es el momento de añadir el relleno. Extiende una capa generosa de mermelada de albaricoque sobre la superficie de la masa, asegurándote de que esté distribuida uniformemente. Espolvorea pan rallado sobre la mermelada; esto absorberá el jugo de la fruta durante la cocción y mantendrá la masa crujiente y sabrosa. A continuación, prepara los albaricoques. Elige albaricoques maduros pero firmes, y córtalos por la mitad. Colócalos con el lado cortado hacia abajo sobre toda la superficie de la tarta para una apariencia atractiva.
Espolvorea el azúcar restante sobre los albaricoques, que ayudará a formar una corteza deliciosa durante la cocción. Precalienta el horno a 200 grados Celsius, luego coloca el molde en el horno durante 10 minutos a fuego alto. Después de este intervalo, reduce la temperatura a 180 grados Celsius y deja que la tarta se hornee durante otros 30-35 minutos, hasta que la masa se dore y los albaricoques estén tiernos.
Una vez que la tarta se haya enfriado completamente, retírala con cuidado del molde. Para un acabado elegante, espolvorea azúcar glas mezclado con azúcar vainillado por encima. Opcionalmente, también puedes añadir una capa de gelatina clara para un brillo extra y un sabor refinado. Esta tarta de albaricoque, con su masa tierna y su relleno jugoso, es perfecta para disfrutarla junto a una taza de té o un café aromático. ¡Buen provecho!
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