Pepinos Búlgaros en Vinagre
Ingredientes: pepino en vinagre azúcar sal gruesa vinagre eneldo cebolla semillas de mostaza
Para preparar un delicioso encurtido de pepino con cebolla, seguiremos unos pocos pasos simples pero esenciales para lograr un resultado sabroso, perfecto para acompañar las comidas de verano o para ser utilizado en diversas ensaladas.
Comenzamos lavando bien los pepinos bajo un chorro de agua fría, asegurándonos de eliminar cualquier impureza. Después de limpiarlos, cortamos los extremos para asegurarnos de que no haya partes duras. Luego, nos ocupamos de la cebolla; la pelamos y la cortamos en rodajas finas, que añadirán un sabor especial a nuestros encurtidos.
A continuación, tomamos los frascos de 800 ml y comenzamos a llenarlos. El primer ingrediente que añadimos es la cebolla cortada, colocándola uniformemente en el fondo de los frascos. Luego, introducimos los pepinos de pie, asegurándonos de que estén bien apretados para maximizar la cantidad que podemos conservar.
Después de arreglar las verduras, añadimos 1 cucharadita de sal, que ayudará a conservarlas, y 2 cucharaditas de azúcar para equilibrar la acidez. Continuamos con 5 cucharadas de vinagre, que dará un sabor picante y ayudará a conservar los encurtidos. No olvidamos los sabores esenciales, así que añadimos unas ramitas de eneldo, que proporcionarán un sabor especial, y unas semillas de mostaza para añadir un aroma extra.
Para completar los frascos, añadimos agua hasta el borde, teniendo cuidado de no exceder el límite. Ahora, es el momento de prepararnos para la esterilización. Tomamos una olla grande, donde colocamos un paño de cocina en el fondo para proteger los frascos del calor excesivo y evitar que se rompan.
Colocamos los frascos en agua y los dejamos hervir durante 15-20 minutos a fuego medio, para que los ingredientes se combinen armoniosamente y los sabores se impregnen bien. Una vez que se ha agotado el tiempo de ebullición, retiramos los frascos con cuidado y los dejamos enfriar completamente sobre un paño.
Después de que se hayan enfriado, los encurtidos se pueden almacenar en la despensa, donde se conservarán fácilmente durante unos meses. Estos encurtidos de pepino con cebolla no solo son deliciosos, sino que también son un acompañamiento perfecto para cualquier comida, trayendo un sabor de verano incluso en los días más fríos del invierno. ¡Disfrútalos con placer!
Etiquetas: cebolla azúcar pepinos recetas sin gluten recetas sin lactosa recetas vegetarianas recetas sin grasa

